Protección indeseable

Me niego a protegerte más que lo justo, o mejor dicho, me niego a protegerte en nada, sólo a darte apoyo, el mínimo posible a pesar de mis deseos de envolverte con mis alas, meterte en mi nido y regalarte toda mi batería de consejos.
Me niego a las ganas de llorar a mares contigo, eso no te va a ser de ninguna utilidad.
Me niego a apoyar tus quejas a ciegas con abrazos y besos y, lo que es peor, con justificaciones de tus propias justificaciones.
Me niego a apoyarte en tu locura para hacer de tí un bebé indefenso y dependiente, muy dependiente, demasiado dependiente.
Si todos hicieran lo mismo, hablando claro, pero con el respeto y la ternura que mereces, escaparías con más rapidez de tu nube negra, crecerías más deprisa a tu favor.
Pero te envuelven demasiados algodones que se apegan a tus errores por pura bondad, y no, no es eso lo que necesitas.
Hay que abrir los ojos, Corazón, hay que dejar pasar al sentido común y sentarlo en un trono, el nuestro, relativizarlo todo, pensar, sentir, pero jamás en el extremo, en ningún extremo....
Pon tu Inteligencia, regalo valiosísimo de la Naturaleza, a trabajar a tu favor, ya es hora...
Apoyo no te va a faltar, espero que sí te falte protección, por tu propio bien.
Un beso a quién yo sé, que es hoy como hemos sido muchos y que no será así mañana....espero.

5 comentarios:

Alberich dijo...

Umm
Dificil situación la que se intuye por tus palabras,Kaken.
Espero que todo salga OK.

Kaken dijo...

Gracias, Albe, pero afortunadamente no es una situación personal de lo que hablo en ese "ejercicio"
Trataba, simplemente,de reflexionar acerca de lo que creo que debemos hacer ante personas que aún no han madurado, tengan la edad que tengan.
Envío un beso impostado, para que llegue a todos aquellos que sufren por el mero hecho de vivir encerrados en ellos mismos y sus miedos, un beso a su falta de crecimiento y paz interior y un deseo de que crezcan y sean todo lo felices que puedan, y una norma básica: no proteger.
Conozco a bastantes personas en ese trance, a veces, por momentos, yo misma,así que, ya ves, de eso se trataba.
Pero gracias por leerme y dejar aqui tu trocito de tiempo.
Lo que cuenta no es entenderme, sino que cada cual entienda lo que surja.
Un bes.

Eli dijo...

Kaken, ni te imaginas cómo te entiendo.
Para bien o para mal yo he tenido que ser brutalmente sincera en muchas ocasiones; de una manera u otra tenía que tratar de abrir unos ojos que se negaban a mirar de frente, obligar a enfrentarse a las cosas que dolían, mantener el tipo y la cordura...y no es fácil ser de roca.
El instinto te pide ser dulce, protectora, solidaria...pero derramar lágrimas juntos no sirve para nada. Y alguien tiene que tomar las riendas.

Espero que esas personas que te leen comprendan cuánto las quisiste para comportarte así.

Besos, Kaken.

Lal dijo...

Hay que querer mucho a alguien para hacer eso, para no tomar el camino facil, para arriesgarse a ser "la mala". Ojalá de frutos.
Un beso, K.

Jose dijo...

Una "bofetada" a tiempo o dejar que una persona se estrelle por si sola, siempre estando ahí para ayudarla, puede ser de lo más efectivo que haya para hacer madurar y crecer a cualquiera.

Es cierto que quizás a corto plazo no tenga las repercusiones esperadas, pero, como todo, el tiempo se encarga de poner las cosas en su sitio.

Tu veras como al final se dará ese beso o ese abrazo. Animo K!