Protección indeseable

Me niego a protegerte más que lo justo, o mejor dicho, me niego a protegerte en nada, sólo a darte apoyo, el mínimo posible a pesar de mis deseos de envolverte con mis alas, meterte en mi nido y regalarte toda mi batería de consejos.
Me niego a las ganas de llorar a mares contigo, eso no te va a ser de ninguna utilidad.
Me niego a apoyar tus quejas a ciegas con abrazos y besos y, lo que es peor, con justificaciones de tus propias justificaciones.
Me niego a apoyarte en tu locura para hacer de tí un bebé indefenso y dependiente, muy dependiente, demasiado dependiente.
Si todos hicieran lo mismo, hablando claro, pero con el respeto y la ternura que mereces, escaparías con más rapidez de tu nube negra, crecerías más deprisa a tu favor.
Pero te envuelven demasiados algodones que se apegan a tus errores por pura bondad, y no, no es eso lo que necesitas.
Hay que abrir los ojos, Corazón, hay que dejar pasar al sentido común y sentarlo en un trono, el nuestro, relativizarlo todo, pensar, sentir, pero jamás en el extremo, en ningún extremo....
Pon tu Inteligencia, regalo valiosísimo de la Naturaleza, a trabajar a tu favor, ya es hora...
Apoyo no te va a faltar, espero que sí te falte protección, por tu propio bien.
Un beso a quién yo sé, que es hoy como hemos sido muchos y que no será así mañana....espero.